Sevilla, 2 jun (EFEAGRO).- Un 36 % de los consumidores de tabaco en Andalucía lo compra en canales ilícitos, dos puntos más que hace un año, mientras que sólo un tercio conoce cuáles son los puntos de venta legales, según los resultados de un estudio de la Unión de Consumidores de Andalucía y Altadis.
Andalucía es, con mucha diferencia, la región española donde se consume más tabaco de contrabando, con una media del 46,5 % del total de tabaco ilícito detectado en España, ya que en esta región es “muy fácil encontrar puntos de venta ilegales” mientras que en otros sitios estas redes no están tan extendidas.
El presidente de la UCA, Juan Moreno, y la directora de asuntos corporativos y legales de Altadis, Rocío Ingelmo, han presentado hoy las conclusiones del estudio, realizado a través de 1.500 entrevistas telefónicas durante marzo en el territorio andaluz.
El desconocimiento de los canales legales, así como la crisis económica y la elevada fiscalidad han contribuido al repunte del comercio ilícito de tabaco en los últimos años, han explicado.
A pesar de que los encuestados reconocen los perjuicios sociales y económicos del tabaco ilícito, un 50 % ve normal buscar productos más baratos, aunque sea en canales ilícitos (kioskos sin máquinas expendedoras, bares y restaurantes, tiendas de conveniencia y domicilios particulares).
Los estancos y las máquinas expendedoras son los únicos canales legales para la venta de tabaco en España, aunque es muy habitual ver a gente con carritos que venden tabaco en la calle o los mercados o en los quioscos o establecimientos hoteleros, incluso en domicilios particulares, han indicado.
Estas prácticas suponen perjuicios para la salud porque el tabaco no pasa los controles sanitarios y así lo ve un 85 % de los encuestados.
También el contrabando de tabaco tiene repercusiones económicas y así lo constata el 90 % de los encuestados, ya que favorece la economía sumergida y se elude el pago de impuestos, con la pérdida de recaudación que supone para las comunidades autónomas.
En este sentido, la responsable de Altadis ha cuantificado en unos mil millones la pérdida de recaudación que supone en España el contrabando de tabaco, y ha alertado de que el ahorro que supone comprar tabaco ilegal va a parar a traficantes y mafias.
El responsable de UCA ha alertado también que los circuitos ilegales de compra de tabaco permiten acceder a su consumo a los menores de edad, a los que está prohibida la venta en los estancos y en las máquinas expendedoras.
Además, ha apuntado que el comercio ilegal del tabaco está causando un gran daño al sector estanquero andaluz y ha reclamado a las autoridades más contundencia en perseguir estas prácticas.
A este respecto, ha recordado que la UCE ha llegado a acuerdo con los ayuntamientos de casi todas las capitales andaluzas para extremar la labor de la policía local en la vigilancia de estas prácticas de contrabando de tabaco.
Asimismo, Juan Moreno y Rocío Ingelmo han abogado por perseverar en las campañas de concienciación social de los perjuicios del comercio ilegal de tabaco, aunque han reconocido que no es fácil pero hay que evitar que se instale la “cultura de la permisividad”.
También han hecho un llamamiento a las autoridades de consumo de la Junta de Andalucía para que extiendan sus campañas de inspección a los circuitos ilegales de venta de tabaco.
