Bruselas, 16 jun (EFE).- La Comisión Europea informó hoy de que las aduanas de la Unión Europea (UE) confiscaron 816 millones de cigarrillos de contrabando entre marzo y diciembre de 2013, con lo que las incautaciones de tabaco se duplicaron con respecto al mismo periodo de 2012.
Estos datos se desprenden del informe presentado hoy por la Comisión Europea (CE) sobre los resultados de la operación «DISMANTLE» (desmantelar) que durante diez meses reforzó los controles en las aduanas de la frontera este de la UE para evitar el contrabando y fraude de tabaco y alcohol.
Así, retuvieron también de 240.000 litros de alcohol destinados a entrar ilegalmente en los Veintiocho.
Las autoridades aduaneras nacionales llevaron a cabo controles comunes, con lo que consiguieron elevar en un 105 % el número de incautaciones registradas en el sistema común de aduanas con respecto al mismo periodo de 2012.
Según el informe, la mitad del tabaco de contrabando detectado llegó en barco desde Asia, Oriente Medio y el Norte de África, mientras que el 33 % procedía de países del este de Europa, sobre todo Rusia, Ucrania, Bielorrusia, Bosnia Herzegovina y Serbia y el restante 10 % era de origen desconocido.
En la mayor parte de casos se confiscaron cantidades pequeñas y medianas de tabaco o alcohol, introducidas en la UE por pasajeros.
Algunos de estos se produjeron entre países de la propia Unión en lugar de a través de las fronteras exteriores.
En un gran número de ocasiones los contrabandistas viajaban en tren, con los productos ilegales escondidos en sus maletas bajo una primera capa de otras cosas.
Los autoridades aduaneras advierten en su informe de los riesgos del contrabando a través de las denominadas «fronteras verdes», es decir, aquellas situadas en lugares donde no hay puestos aduaneros como pueblos o ríos.
Para abordarlo sugieren utilizar unidades móviles.
Por otra parte, subrayan la gran diversidad de políticas aduaneras que hay entre los Veintiocho y destacan la utilidad de que las autoridades nacionales trabajen juntas para compartir prácticas, analizar riesgos y vigilar los resultados, tal como han hecho en la operación «DISMANTLE».
Así, señalaron que los análisis comunes han permitido destapar cinco casos de fraude trasnacional con tabaco y alcohol que de otra forma no habrían sido detectados.
En este sentido el comisario europeo de Lucha contra el Fraude, Algirdas Semeta, destacó en un comunicado que la operación «muestra que pueden conseguirse grandes resultados cooperando para identificar riesgos comunes y compartir información».
Señaló que «la valiosa perspectiva de esta acción debería ayudar a mejorar más aún las acciones en las aduanas» y recordó que estas «no solo defienden los intereses financieros de la UE sino a los ciudadanos y negocios legítimos».
«DISMANTLE» forma parte de las denominadas «acciones prioritarias de control» que sirven para que las aduanas pongan en marcha controles comunes para vigilar riesgos específicos.