Mérida, 27 oct (EFEAGRO).- La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas, vecinas de Mérida, y se ha incautado de 53 toneladas de hoja de tabaco ocultas en una nave de la localidad de Lobón (Badajoz), con las que se podrían haber obtenido 38 millones de cigarrillos para el mercado ilegal y un lucro de alrededor de cuatro millones de euros.
La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, ha informado este martes de la denominada operación Mostaganen, en una rueda de prensa en la que también ha intervenido la delegada de la Agencia Tributaria en Extremadura, Clara Isabel Santos.
Junto a ellos ha estado el concejal de Seguridad de Mérida, Antonio Guijarro, ya que la Policía Local de la ciudad también ha participado en la operación que ha desmantelado esta red ilegal.
Gámez ha destacado que es una de las mayores operaciones realizadas en Extremadura contra el contrabando y venta ilícita de hoja y picadura de tabaco.
La investigación se inició en junio tras detectar la circulación y venta ilícita de picadura de tabaco de contrabando, en la que se constataban patrones similares, vinculados a los movimientos de un grupo de personas asentadas en la provincia de Badajoz y Madrid, con antecedentes por hechos similares.
Tras establecer un dispositivo de vigilancia, los agentes descubrieron en el polígono industrial de Lobón una nave utilizada por el grupo, donde se almacenaba el tabaco picado y la hoja.
Con la ubicación del inmueble y la identidad del propietario, quien tenía la nave alquilada, se llevó a cabo el registro de la nave, donde se aprehendieron 265 cajas de cartón que contenían 53.100 kilos de hoja de tabaco triturada y picada, que carecían de cualquier control fiscal y sanitario, así como productos aromatizantes para el tabaco.
Durante la operación, se detuvo a cuatro de los integrantes de la red y se continúan las gestiones para localizar y detener a los otros dos que supuestamente habrían huido de España, así como conocer la procedencia y el destino exacto del tabaco intervenido, de los que se podrían obtener unos 38 millones de cigarrillos.
A los ahora detenidos, que fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Montijo, se les imputa los supuestos delitos de contrabando de tabaco, contra la Hacienda Pública y pertenencia a grupo organizado.
Gámez ha advertido de que, con este tipo de actuaciones delictivas, no solo se produce un perjuicio a la hacienda pública, sino que se evita un riesgo para la salud, porque estos productos no cuentan con ninguna garantía sanitaria, y se contribuye a defender los intereses de las familias que viven legalmente del cultivo del tabaco en Extremadura.
Por ello, la Guardia Civil trabaja intensamente en el control del contrabando de tabaco y muestra de ello es la aprehensión a nivel nacional de más de 3.500.000 cajetillas en 2019, que ha subido ya en 2020, a falta de dos meses para cerrar el año, a más de 5.500.000 cajetillas.
La responsable de la Agencia Tributaria en Extremadura ha mostrado su satisfacción por esta operación, ya que el contrabando de tabaco es una importante fuente de fraude, puesto que prácticamente el 80 % del precio de venta de los cigarrillos son impuestos.
Santos ha señalado que Vigilancia Aduanera incautó 155.000 kilos de picadura y hoja de tabaco en 2019 a nivel nacional, pero en lo que va de año son ya 334.000.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes pertenecientes al Área Fiscal del Puesto de la Guardia Civil de Badajoz, por funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria de Badajoz y por miembros de la Policía Local de Mérida.