Madrid, 20 jul (EFEAGRO).- El Pleno del Consejo Económico y Social (CES) ha dado su visto bueno al Anteproyecto que modificará la llamada “ley antitabaco” presentado por el Gobierno, aunque ha recordado que España “ha incumplido los plazos” a la hora de transponer la directiva europea que regula esta materia.
El dictamen del CES -órgano consultivo en el que participan sindicatos, patronales y otras entidades-, conocido hoy, apunta a que “con carácter general y salvo algunas observaciones” el documento “transpone adecuadamente” la normativa europea.
No obstante, señala que esta adaptación de la legislación española llega “de manera extemporánea al incumplir los plazos”, ya que la fecha límite expiraba en mayo de 2016.
La transposición, aprobada en Consejo de Ministros el pasado 9 de junio, se ha ejecutado en dos partes: un real decreto -ya vigente- y este Anteproyecto, que todavía debe ser debatido en el Parlamento.
Desde el CES han considerado que en este último “se echa en falta una evaluación de los efectos de la aplicación de la ley (antitabaco) de 2005, que entre otros aspectos prohibió el consumo de tabaco en los centros de trabajo, establecimientos de hostelería, estaciones, puertos, medios de transporte y centros de formación”.
El órgano consultivo destaca, asimismo, que el Gobierno ha optado en este Anteproyecto por las medidas “más restrictivas” posibles en materia de protección al menor, pese a que en ese ámbito la directiva comunitaria dejaba margen a los Estados miembros.
Una de las principales novedades que introduce el documento elaborado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad es legislar algunos aspectos relativos a los nuevos productos del tabaco y a los cigarrillos electrónicos.
En este sentido, el CES ha defendido que era necesario “actualizar la normativa vigente” debido a la proliferación de webs donde se venden algunos de estos productos, y en las que la labor de control y supervisión reviste “mayor dificultad” para evitar el acceso de los menores.
El Anteproyecto prohíbe con carácter general su venta a distancia o a través de Internet, un punto que desde el órgano consultivo consideran que demuestra que el legislador español ha optado por las medidas “más restrictivas” posibles.
En el dictamen del CES se advierte de que prohibir la venta por Internet “puede resultar ineficaz”, ya que su aplicación sólo afectaría a las empresas españolas y no a las ubicadas en otros países.
En su opinión, esta restricción “puede implicar distorsiones en el mercado que es necesario evitar”.
“Más allá de los filtros de protección que puedan proporcionar ciertos instrumentos informáticos o de los mecanismos de control de la edad que se puedan desarrollar en el entorno digital, se debe incidir en la información y la educación de los menores y en el asesoramiento a sus padres y tutores legales en el uso de Internet”, asegura. EFEAGRO
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