Cáceres, 28 jun (EFEAGRO).- La Guardia Civil en una operación conjunta con la Agencia Tributaria ha detenido a dos vecinos de Miajadas (Cáceres) con 822 kilos de tabaco en rama, cuyo destino era su venta en el mercado negro en la provincia cacereña.
A los detenidos, un hombre de 26 años y una mujer de 34, se les imputa un supuesto delito de contrabando, según informa la Comandancia de la Guardia Civil de Cáceres en una nota de prensa.
A raíz de la alarma social que se estaba generando en la localidad de Miajadas, y tras interponerse una denuncia en Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, se inició una investigación a mediados del mes de marzo que ha sido bautizada como operación “Gathaca”.
El pasado sábado, 24 de junio, consiguieron interceptar una furgoneta usada para el transporte de tabaco, en la cual fueron hallados 690 kilogramos de tabaco en rama, procedente de la comarca de La Vera y cuyo destino era su venta minorista en Miajadas.
A continuación, y tras la detención de las dos personas mencionadas, se procedió al registro de la vivienda de uno de ellos, donde se intervinieron otros 80 kilos de tabaco en rama, en distintos procesos de transformación, así como una máquina eléctrica y otra manual para picar el tabaco, “lo que demostraba la existencia de un punto de venta de tabaco ilegal”, han indicado las mismas fuentes.
Además, se procedió a la inspección de una nave industrial en la localidad de Talayuela (Cáceres), siendo hallados otros 52 kilogramos de tabaco, también en distintos procesos de transformación, y dos básculas que se utilizaban para su pesaje.
Los dos detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Trujillo como supuestos autores de un delito de contrabando.
La Guardia Civil y la Unidad Operativa de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria de Cáceres a continuarán trabajando conjuntamente contra este tipo de defraudación a la Hacienda Pública.
Sin embargo, han advertido de que a pesar de que se intenta vender en el mercado negro como “tabaco en hoja más sano y natural, esconde el potencial peligro de que no ha sido sometido a ninguno de los controles de sanidad y calidad de los exigidos al género que se vende de forma legal”. EFEAGRO
