Cáceres, 26 jun (EFEAGRO).- Agentes de la Guardia Civil de Madrigalejo (Cáceres), en colaboración con la Policía Local, han intervenido 1 kilo de tabaco picado y 600 cigarrillos, cuyo destino era el mercado negro, y se han levantado actas por infracciones administrativas de contrabando a un ciudadano rumano.
La Guardia Civil tuvo conocimiento de que en Madrigalejo se transportaba, distribuía y vendía cigarrillos de fabricación casera, sin ningún tipo de precinto fiscal, ni control sanitario, según informa la Comandancia de Cáceres en una nota de prensa.
El pasado 14 de junio la Guardia Civil, en colaboración con la Policía Local de dicho municipio, localizaron a una persona que circulaba con un vehículo y que al identificarle, «presentaba un elevado estado de nerviosismo», por lo que se registró el coche en el que viajaba.
Los agentes hallaron bajo los asientos una bolsa con un kilogramo de tabaco picado, tres cajas con 200 cigarrillos cada una, preparadas para su venta, así como una máquina para la elaboración artesanal del producto. Todo ello, sin los correspondientes precintos fiscales ni controles sanitarios.
La Guardia Civil se aprehendió del tabaco y levantó las correspondientes actas por infracciones administrativas de contrabando.
Este delito consiste en el desvío ilegal de hoja de tabaco con destino a los consumidores, siendo una nueva defraudación a la Hacienda Pública, y a pesar de que se intenta vender en el mercado negro como «tabaco en hoja más sano y natural», existe «el peligro de que no ha sido sometido a ninguno de los controles de sanidad y calidad de los exigidos al género que se vende de forma legal». EFEAGRO