París, 6 nov (EFE).- El Gobierno francés anunció hoy que prepara un dispositivo para combatir el comercio en línea de tabaco, que supone un fraude al monopolio estatal y una pérdida de recaudación fiscal, y prevé establecer sanciones para los que hagan compras por internet.
El secretario de Estado de Hacienda, Christian Eckert, fue el encargado de presentar estas medidas en París, precisamente con ocasión del Congreso Nacional de Estanqueros, un colectivo que ha organizado protestas en los últimos meses porque se consideran perjudicados por diversos cambios en la normativa del tabaco.
Eckert explicó que los servicios aduaneros actualmente ya trabajan en la identificación por internet de los sitios que se dedican a vender tabaco en línea, pero que quiere «ir más lejos».
Señaló que la nueva directiva europea sobre el tabaco permite que cada Estado pueda prohibir el comercio a distancia, y para garantizar que eso se cumpla los vendedores implantados donde esa práctica está autorizada tendrán que registrarse ante las autoridades y los Estados habrán de cooperar unos con otros.
Sobre la base de esos textos, el secretario de Estado pretende poner en marcha un «plan de acción coherente, realista y eficaz contra la venta ilícita de tabaco por internet».
El plan incluirá «un régimen de sanciones disuasorias para los compradores», en particular si actúan en banda organizada y un reforzamiento de la supervisión.
En concreto, el Ejecutivo va a establecer colaboraciones con las empresas de paquetería, a las que los servicios aduaneros les presentarán una lista de sitios de venta de tabaco por internet tanto dentro como fuera de la Unión Europea para que haya una acción preventiva que impide las entregas en Francia.
Además, también se les transmitirán las señas de grandes compradores identificados para que esas empresas puedan identificar paquetes sospechosos que les sean dirigidos y puedan ser controlados por los agentes de aduanas.
El objetivo es tratar de atajar la expansión del que los estanqueros llaman el «mercado paralelo» de tabaco, es decir, el que escapa al monopolio que tienen estos establecimientos en Francia.
Según la Confederación de Estanqueros, a finales de 2013 ese «comercio paralelo» que incluye las compras por internet, pero también las que se hacen en países fronterizos con menos impuestos -como Luxemburgo o España- o las ventas fraudulentas con tabaco de contrabando suponen una cuarta parte del consumo en Francia. EFE